Una maravilla, el mejor dinero invertido. Decidimos hacer un último intento con la RR de nuestra hija, con 11 años, después de haber visitado a otorrino que descartaba algún problema físico, y varios logopedas, incluso el del cole.
En dos sesiones, lo consiguió. La clave una buena profesional Elena. Muchas gracias.

A M